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A vosotros, hermanos de la Vera-Cruz

Celebramos con júbilo el XLVII Aniversario de la Coronación Canónica.

Un año más, la Hermandad de la Vera-Cruz celebró con júbilo el XLVII Aniversario de la Coronación Canónica de nuestra Bendita Madre de las Angustias. Nuestros Titulares presidían el presbiterio en el sencillo y precioso altar efímero montado para la ocasión.  

Con repique de campanas al amanecer se anunciaba la llegada de una jornada solemne para todos los cruceros. A mediodía, con la Capilla de San Gregorio llena de hermanos, se procedía al rezo del Ángelus, el Santo Rosario y Corona de las doce Estrellas.

Por la tarde, Santa Misa de Acción de Gracias, oficiada por nuestro párroco y director espiritual D. Fernando Reyes Rico. Una celebración centrada en María de las Angustias, la Madre de Dios, donde el Evangelio y la homilía de D. Fernando nos enseñaron como María se dejó guiar por la fe, y como Cristo, nos dejó a María como Madre, como modelo de mi vida. El ejemplo de María nos debe motivar a actuar confiadamente en Cristo.

Antes de la bendición final tuvo lugar el homenaje a nuestros hermanos que han cumplido 65 años de vida crucera. Nuestro Hermano Mayor les hacía entrega del pergamino acreditativo ante nuestro Titulares.

Al concluir el Hermano Mayor nos dirigió a todos la siguiente reflexión que transcribimos a continuación:

“El devenir de los años, es la mejor prueba de la palabra dada y de las promesas. Y el examen verdadero como prueba final: el Evangelio.

Los años transcurridos nos dan las respuestas a las preguntas inexorables de nuestra historia: ¿Qué hemos hecho por los demás? ¿Dónde están nuestros propósitos? ¿En qué han quedado nuestras primeras piedras?...

Los años transcurridos nos llevan a responder una sóla pregunta: Cuál es el mensaje cristiano que después de tantos años hemos dejado como Hermandad en Alcalá del Río.

En éste Aniversario de la Coronación Canónica de Nuestra Bendita Madre de las Angustias, seguimos respondiendo preguntas. Y seguimos el caminar trazado gracias a vosotros, hermanos de la Vera-Cruz: con la creencia de estar en la dirección que se espera de nosotros, intentando no desviarnos con lo accesorio, y volcando nuestro corazón y nuestra voluntad en el servicio al prójimo. Vosotros, hermanos en la Vera-Cruz, habéis sido y sois el pegamento de nuestra fe, foco que nos ilumina la oscuridad y testigos de la fuerza de vivir al pie del madero de la Cruz.

El único camino de las Hermandades es vivir pegados a la Cruz: Verdadero cruce de caminos entre lo que nos manda el Evangelio y lo que realmente hacemos. En ello no valen mensajes elocuentes ni grandes alardes de misericordia: Sólo nuestras acciones son la mejor muestra de lo que los Hermanos de la Vera-Cruz han hecho por Alcalá del Río.

VOSOTROS, HERMANOS NOS HABEIS ENSEÑADO A PORTAR EL MADERO DE LA VERA-CRUZ.

La cruz de la familia, con la alegría de poder trabajar todos los días para llevar felicidad a las personas queridas.

La cruz del trabajo, con el que no solamente se tiene lo necesario para vivir, sino que es espacio para la realización personal.

La cruz del mensaje con el que sufre, a través de los pequeños detalles del día a día.

La cruz de la enfermedad y de la muerte, que sólo puede llevarse con la fe, la esperanza y la caridad.

La cruz de la incomprensión social, arropados por el manto de nuestra parroquia y de nuestro párroco y director espiritual, que nos ayuda en la ruta de la conducta moral.

VOSOTROS NOS HABEIS ENSEÑADO A LLEVAR LA CRUZ MÁS PESADA: la del amor al necesitado. Sobreponiéndonos a lo suntuoso, a los mensajes falsos, a las redes sociales y a la tiranía de lo efímero.

Vosotros nos habéis enseñado a querer a la Santísima Virgen de las Angustias a través del cariño a los demás: Con la caridad, con la coherencia entre Cristo y el servicio al pobre y desvalido, buscando en los detalles la mirada de consuelo de la Virgen y amando al prójimo con la esperanza de que nuestro corazón nos hará fuertes porque caminamos juntos.

Gracias a vosotros, hermanos de la Vera-Cruz, hemos cambiado la vida por el perdón, la realidad por la alegría de la esperanza, y hemos combatido a los farsantes con la escucha de la palabra de Dios, siendo auténticos y creíbles misioneros de la misericordia.

HOY, ante tus plantas Virgen de las Angustias Coronada, en éste Aniversario de tu Coronación Canónica, queremos reivindicar la alegría de la Vera-Cruz: desterrando a los profetas de la tristeza, a los que caen en la tentación de dejar pasar y considerar inútil cualquier esfuerzo por mejorar las cosas.

Ni cabe la nostalgia de tiempos pasados, ni plantear dudas sobre la escasez de medios, recursos o personas. La única prueba de hacer… es hacer. Sólo cabe mirar al futuro, unidos con la fuerza del Evangelio y el testimonio de la esperanza. El esfuerzo de querer.

En estos tiempos donde cualquiera se siente investido para juzgar, mentir o agredir a través de la muralla de las redes sociales, quisiera reiterar nuestro profundo agradecimiento porque nos enseñasteis uno de los mejores carismas que puede tener una Hermandad: la ejemplaridad de lo que representamos. Expulsemos del templo a los mercaderes de los complejos, la falta de educación y la ingratitud.

Hoy hermanos, bajo la mirada de la Reina de Alcalá del Rio quiero deciros que sois sin duda la sólida piedra sobre la que seguiremos construyendo nuestro futuro.

Agradecidos, y reconociendo públicamente tantas virtudes que nos habéis entregado; ruego a María Santísima de las Angustias Coronada para que, por su mediación, Dios nuestro Señor en la Santa Vera-Cruz os colme de salud y de bendiciones.”

VUESTRO HERMANO MAYOR